Durante el I Encuentro de Excelencia Operacional en el Sector Pharma -organizado por Global Lean-, varios expertos en diferentes ámbitos se reunieron para discutir diferentes cuestiones, resaltando la importancia de la logística en este ámbito.
El sector farmacéutico está sufriendo un cambio de paradigma. Así se refería Ricardo Catelli, director general de Global Lean, a la extensión del cliente final del sector pharma, que ya no es solo paciente, sino también cliente, durante la apertura del I Encuentro de Excelencia Operacional en el Sector Pharma.
En los últimos dos años el sector ha experimentado grandes cambios tanto para los consumidores como para las empresas. Hoy es un hecho que las prioridades han cambiado, pero también los hábitos, sobre todo los relacionados con la salud y la higiene.
El sector sufre una transición: de depender de recetas para entregar los fármacos a advocar por el autocuidado, así como la dispensación de productos de origen natural y de complementos ampliando los canales de venta.
La excelencia operacional, conocida como opex, incumbe a todos los eslabones de la cadena de suministro. En el caso del sistema sanitario, la eficiencia en la gestión hospitalaria, la atención médica y la distribución equitativa de recursos resultan fundamentales para garantizar que la población reciba el cuidado necesario.
Durante los últimos años -y especialmente tras la crisis sanitaria vivida por la COVID-19– el sector se lleva enfrentando a un mayor número de retos tales como el envejecimiento de la población, la globalización de las enfermedades, la escasa implementación de los estándares internacionales o los cambios legislativos. Por ello, María Ramírez, responsable de Logística del Servicio Andaluz de Salud, hizo hincapié en la necesidad de incidir en la trazabilidad -elemento imprescindible-, así como apostar por la automatización, pero “ir más allá y avanzar hacia estrategias colaborativas entre los actores del sector” para garantizar la excelencia operacional.
Nuevos competidores para las farmacias
Así pues, la cadena de valor farmacéutica tiene una gran responsabilidad social, pero a la vez, el cambio en los hábitos de consumo, la apariencia de nuevos “players” y el auge del ecommerce están haciendo que cobre un mayor peso la figura del “cliente”, es decir, una persona que adquiere productos relacionados con la higiene personal y la salud, pero que no necesitan receta médica.
En este contexto aparecen nuevos canales que hasata ahora no contemplaban la venta de este tipo de productos. Así, sobresalen las grandes cadenas de supermercados, como El Corte Inglés, pero también cadenas de perfumerías como Druni o Primor -e incluso farmacias online, como PromoFarma– que compiten directamente con la sección de parafarmacia de las farmacias tradicionales, según lo expuesto por Juan Pablo Arán, director Comercial de Beiersdorf.
“El ecommerce está estancado. El consumidor vuelve a anteponer la tienda física tras la lejanía de la pandemia. Además, el laboratorio y el canal tiene que consensuar qué quiere realmente el usuario y adaptarlo a cada uno de los canales. Desde las gamas hasta las imágenes y formatos, todo para cada tipología de paciente o consumidor”, expuso Arán.
La excelencia operacional implica una transformación cultural
Durante el encuentro, algunos de los participantes, como Matías Escuder, Gerente Corporativo en Excelencia Operacional y actual responsable de la Unidad de Negocio de Distribución de Megalabs, compartieron su experiencia en el ámbito. Escuder recalcó que, si bien la Excelencia Operacional puede adaptarse a cualquier empresa o entorno, ésta “debe verse como una transformación cultural si buscamos que las mejoras perduren en el tiempo.”
“Es importante contar con el patrocinio de la dirección, una estructura clara y roles definidos para el éxito de una transformación de este tipo. También complementar las capacidades y necesidades internas con aliados estratégicos.”, añadió durante su ponencia.
Operadores logísticos y su importancia para la opex
En este contexto, la logística que rodea los servicios sanitarios se presenta como el “eslabón clave que fusiona la precisión de la logística con la sensibilidad de la salud”, tal y como explicó Ramón García, director del CEL, durante su intervención.
Los operadores logísticos especializados juegan un papel fundamental en este sentido, pues su expertise en la materia los convierte en grandes aliados de las empresas del sector farmacéutico. Para ello, el operador debe tener alta especialización en el sector que opera, ofreciendo una amplia gama de servicios que hagan más eficiente y aporten valor a la cadena de suministro, explica Cesar Roch, director de Operaciones de Logista Pharma, a este medio.
La oferta de servicios tradicionales, así como otros complementarios como son la fabricación parcial, facturación y cobro, soporte a equipos comerciales, contact center para farmacias y hospitales, entre otros, “están completamente ligados a la distribución de un producto que ya de por si es un servicio de alta especialización, garantizando en su distribución el cumplimiento de las normativas GDP”, sentencia Roch.
La colaboración entre actores, clave
La logística inversa, aunque representa un porcentaje pequeño de las incidencias relacionadas con la cadena de suministro del sector farmacéutico, es también compleja. La recogida y el transporte de determinados productos o medicamentos, se debe de hacer en unas condiciones específicas y poder poner de nuevo esos productos a la venta es verdaderamente complejo, tal y como explicó Óscar Castroviejo, responsable del Sector Salud de AECOC, al presentar el estudio Benchmarking Pharma 2023.
A pesar de todos los retos que enfrenta la excelencia operacional en el sector farmacéutico, el evento organizado por Global Lean hizo patente que la colaboración entre todas las partes -fabricantes, farmacias hospitalarias, farmacias comunitarias y distribución- se posiciona como requisito clave para acercar los medicamentos y productos sanitarios a los pacientes y usuarios.
