El índice CPPI 2025 destaca el rendimiento operativo del puerto marroquí por encima de enclaves europeos y asiáticos
El Puerto de Tánger Med ha alcanzado la tercera posición en el Container Port Performance Index 2025 (CPPI), elaborado por el Banco Mundial en colaboración con Standard & Poor’s.
La infraestructura marroquí se sitúa así por delante de terminales consolidadas de Europa, Asia y América, siendo superada únicamente por los puertos de Yangshan (China) y Salalah (Omán).
Este índice, publicado anualmente, analiza más de 400 instalaciones portuarias a nivel global y evalúa su rendimiento en base a factores como los tiempos de atraque, la velocidad en las operaciones de carga y descarga, el nivel de digitalización y su integración con las cadenas logísticas internacionales.
Implicaciones logísticas para el comercio intercontinental
La posición destacada de Tánger Med en el ranking tiene especial relevancia para el sector logístico europeo. Su localización estratégica, en el estrecho de Gibraltar, le permite actuar como nodo clave en las rutas entre Europa, África y América, incrementando su atractivo para los flujos de mercancías que conectan continentes.
Además del rendimiento operativo, el informe también tiene en cuenta aspectos como la conectividad global del puerto y su capacidad de adaptación a las exigencias del comercio internacional.
De esta manera, Tánger Med ha logrado consolidar su posición gracias a una combinación de inversiones en automatización, ampliación de capacidad y políticas orientadas a la eficiencia.
Una referencia creciente frente a los puertos del sur de Europa
El avance del enclave marroquí implica un cambio en el equilibrio portuario del Mediterráneo Occidental. En ediciones anteriores del CPPI, los puertos del sur de Europa —como Algeciras, Valencia o Barcelona— figuraban en posiciones destacadas, pero en esta edición Tánger Med ha logrado superarlos en indicadores clave de rendimiento.
La evolución de Tánger Med plantea nuevos retos para las autoridades portuarias y operadores logísticos europeos, en un contexto marcado por la competencia creciente y la necesidad de reforzar la eficiencia en las cadenas de suministro transcontinentales.
