Coherencia institucional y uniformidad legislativa y documental. Estas son las dos principales reclamaciones del sector del transporte por carretera que, bajo la representación de ASTIC, tildan al contexto actual como un “caos normativo” derivado de la heterogeneidad de las medidas adoptadas por cada país ante la segunda ola pandémica.
De esta forma, la Asociación del Transporte Internacional por Carretera ha mostrado su rechazo público ante el aumento de burocracia que se está produciendo en los países europeos y en las 17 Comunidades Autónomas, que supone la exigencia de múltiples documentos diferentes en formato, contenido y alcance para que los profesionales de la carretera puedan seguir ejerciendo su labor.
“Se está conformando un verdadero caos”, advierten desde ASTIC. “Resulta especialmente sangrante comprobar que ante medidas como las recientemente tomadas por el gobierno autonómico de Cataluña, se vuelva a dejar en la estacada, sin el menor respeto a sus necesidades, a los conductores profesionales que se ven forzados, en el ejercicio de su esencial misión, a recorrer las redes viales, sean regionales, nacionales o europeas”, añaden desde la patronal española.
Tras la celebración de la XXIII Conferencia de Presidentes autonómicos con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, ASTIC considera que se ha perdido una valiosa oportunidad para clarificar los criterios de reparto entre las CCAA para la gestión directa de los 12.400 millones de euros del Fondo React europeo – una parte de los 140.000 que han sido asignados a España del Fondo de Recuperación y Resiliencia de la UE -.
Un sector en estado de emergencia
Mientras todo esto sucede, los principales sectores productivos siguen sin recuperarse, entre ellos, el del transporte de mercancías por carretera, que sufre una caída en torno al 10 y el 20 por ciento con respecto a la actividad habitual, precipitado por el aumento exponencial de kilómetros en vacío (-30 por 100) y la consiguiente pérdida de rentabilidad.
A esto se suma el descenso del 12 por ciento en los peajes internacionales y del 10 por ciento en el consumo de combustible por vehículos pesados.
“Desde el Gobierno anuncian, a bombo y platillo, que los criterios de reparto de fondos de europeos serán ‘objetivos y transparentes’ en su borrador del Plan ‘España Puede’, pero la experiencia reciente nos hace temer que al final no sea así y quedemos muy lejos de lo que alentó Von der Leyen: ‘Esta es vuestra oportunidad para salir de esta crisis: inversión europea, reformas valientes e ideas audaces para el futuro de la economía española’. Por tanto, solicitamos, más que nunca, coherencia institucional y uniformidad legislativa y documental”, señala Ramón Valdivia, director general de ASTIC.
