El gigante del comercio electrónico ha cancelado recientemente pedidos de productos fabricados en China, Vietnam y Tailandia, en una medida que afecta directamente a su modelo de importación directa, según ha informado Bloomberg. Este sistema permite a la empresa adquirir mercancía al por mayor en origen y actuar como importador oficial en EE. UU., asumiendo los costes arancelarios al ingreso.
El ajuste se produce pocos días después de que Donald Trump anunciara nuevos aranceles a las importaciones procedentes de más de 180 países y territorios, lo que ha llevado a varios proveedores a interpretar la cancelación de pedidos como una respuesta preventiva al nuevo entorno comercial.
Aunque la compañía no ha vinculado oficialmente la decisión a la política arancelaria, el contexto ha generado incertidumbre en la red de suministros.
Entre los productos afectados se encuentran sillas de playa, patinetes y aparatos de aire acondicionado. En uno de los casos recogidos por el medio estadounidense, un proveedor con más de una década de relación comercial recibió la notificación de cancelación de un pedido valorado en 500.000 dólares, ya fabricado y listo para su envío.
Impacto directo en la red de proveedores
La decisión puede interpretarse como un intento de reducir la exposición fiscal y trasladar el riesgo arancelario a los proveedores, quienes deberán asumir los costes de importación si optan por mantener la operación.
En su último informe anual, la empresa ya advertía que los conflictos comerciales internacionales representan un riesgo estructural para su actividad, dada su alta dependencia de proveedores asiáticos.