Incidentes en la huelga de transporte en Barcelona

Las organizaciones patrronales del transporte de mercancías por carretera coinciden en reconocer los incidentes que han salpicado la primera de las tres jornadas de huelga en el transporte de mercancías por caerretera, convocada por CC. OO. y UGT en la provincia de Barcelona, que ha ocasionado problemas en los principales centros logísticos, especialmente alrededor de la CIudad Condal.

Mientras CETM hablaba de un “seguimiento de la huelga muy escaso” y de la “acción de los piquetes” que estaban ocasionando “incidencias en el desarrollo de la actividad en determinados polígonos industriales como son la CIM del Vallés, la Zona Franca y la ZAL”, UNO expresaba en un comunicado su voluntad de continuar negociando con los sindicatos, al igual que ya hizo en 2011 con la firma de un acuerdo extraestatutario que permitió desconvocar la huelga convocada entonces en diciembre de ese año.

Esta patronal a través de ACET-UNO Catalunya ha ofrecido a los sindicatos ampliar el convenio actual hasta el 31 de diciembre para dar tiempo a las partes a negociar todos los contenidos del mismo. 

UNO ha puesto el énfasis en que “lo peor es la actitud de la Consellería d’Interior de la Generalitat que impide que los Mossos d’Esquadra actúen adecuadamente contra los piquetes informativos que no ejercen adecuadamente sus derechos”, afirmando igualmente que los propios Mossos cortaron el acceso desde la AP-7 al polígono del CIM del Vallés para evitar la acumulación de vehículos a la entrada de éste que llegarían a colapsar la autopista. 

Según la nota difundida por UNO, han hablado con mandos de los Mossos, vinculados al transporte así como con Dirección General de Transportes y Movilidad de la Generalitat de Catalunya, que han manifestado su comprensión hacia la situación que padecen las empresas y los trabajadores del sector que quieren trabajar y no pueden, pero manifiestan que no pueden hacer más mientras las instrucciones operativas no cambien.

Por todo ello UNO “quiere denunciar aquí la actitud sindical que, obstinadamente, y contra la legalidad vigente, pretende imponer criterios de negociación colectiva a las empresas que éstas no pueden asumir”.

Además, manifiesta su más “enérgica protesta por la actuación de los Mossos d’Esquadra, que, lejos de garantizar los derechos de todos y los servicios mínimos, prefieren quitarse problemas de encima admitiendo comportamientos contrarios a los derechos de la mayoría de los trabajadores que desean ejercitar su derecho al trabajo”.