Los logísticos de Ikea testarán el uso de exoesqueletos en las instalaciones de Barcelona y Madrid

Con este nuevo proyecto, que consiste en usar exoesqueletos y con la finalidad de “crear un mejor día a día” en la vida de sus empleados y mejorar la calidad laboral de los mismos, Ikea se convierte en la primera empresa de su sector en probar esta tecnología.

Los test se iniciarán en las tiendas de Badalona (Barcelona), San Sebastián de los Reyes y Vallecas (Madrid) como proyectos piloto y en ellas se ha presentado a los empleados participantes como superhéroes dentro de su campaña interna de comunicación, como refuerzo de concienciación sobre los riesgos laborales que se pueden dar en los entornos logísticos. Una campaña que, denominada “Exo-workers”, presenta a tres de los primeros empleados y empleadas en utilizar esta tecnología como superhéroes que luchan contra “La Mala Postura”, convirtiéndoles en personajes de una tira de cómic distribuida en todas sus unidades.

Con ello, Ikea asegura que sigue explorando nuevas medidas que mejoren las condiciones de sus empleados en España, en la línea de prevenir riesgos laborales derivados de la manipulación de cargas y/o posturas forzadas, como pueden ser la fatiga o las lesiones musculo-esqueléticas.

En una primera fase, estos trabajadores utilizarán el mecanismo en su día a día durante seis semanas, tiempo durante el cual recibirán seguimiento por el equipo médico de cada tienda para documentar su evolución y desempeño físico. Además, antes de su puesta en marcha, han recibido una formación específica por parte de Ikea y del grupo desarrollador del producto –ITURRI (www.iturri.com)- para asegurar un uso adecuado.

Tras esta fase piloto se evaluarán los resultados, su funcionalidad y el beneficio real que tiene para la plantilla de Ikea y de ser favorable, se extenderá al resto de tiendas y unidades de Ikea en nuestro país.

En cuanto al exoesqueleto, se trata de un soporte portátil para la espalda pensado para ayudar a los usuarios mientras trabajan en una postura de flexión hacia adelante o cuando levantan objetos especialmente pesados, reduciendo la tensión física.

Gracias a su mecanismo la fuerza aplicada en estos movimientos es desviada hacia la parte superior de las piernas y su bastidor portátil soporta parte del peso del cuerpo del usuario, lo que disminuye la tensión en la espalda. De hecho, Ikea calcula que todo ello reduce hasta en un 50 por 100 la actividad soportada por los músculos de esta parte del cuerpo, lo que supone menor presión en las vértebras y menor riesgo de lesiones. Otro de sus grandes atributos es su estructura flexible que hace que además de proporcionar soporte al usuario, este pueda caminar y mover su cuerpo con naturalidad.