La falta de mano de obra y las necesidades de un entorno logístico digitalizado darán lugar a cadenas de suministro cuyos actores estarán mucho más especializados y tendrán que trabajar en estrecha colaboración.
La logística se encuentra en un momento de transformación principalmente impulsado por el avance tecnológico, los cambios en el modelo de consumo y la necesidad de mejora en materia de sostenibilidad. Según las previsiones realizadas por expertos de Generix, compañía de software empresarial, en la próxima década el modelo de cadena de suministro será irreconocible comparado con el actual, con una mayor digitalización, especialización y colaboración entre actores del sector.
Philippe Ducellier, General Manager EMEA South y Latam en Generix, afirma que “el modelo de logística del futuro llevará consigo una mayor colaboración entre empresas del sector, especialización de los proveedores en servicios concretos, aplicación de tecnologías revolucionarias y la lucha por atraer nuevo talento”. Según Ducellier, la adaptación a las nuevas necesidades del consumidor será clave para que las compañías del sector se mantengan competitivas.
Uno de los principales motores de cambio será el imparable crecimiento del consumo online, que ha registrado un aumento del 22% a nivel global en el último año, según datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. Este aumento del comercio electrónico, que se espera que sea sostenido en el tiempo, exigirá una logística más eficiente, ágil y especializada, que pueda diferenciarse de la competencia a través de servicios innovadores.
La especialización juega un papel clave
Los expertos de Generix destacan varios pilares sobre los cuales se transformará la cadena de suministro en los próximos años:
- Conectividad y colaboración: Las cadenas de suministro estarán más interconectadas, con un flujo de información en tiempo real entre todos los actores del proceso. Esto permitirá una mejor capacidad de reacción y toma de decisiones más informadas, favoreciendo una mayor colaboración entre empresas.
- Especialización: En lugar de abarcar todas las fases del proceso logístico, los operadores tenderán a especializarse en áreas concretas, como el almacenamiento o la preparación de pedidos, lo que les permitirá ofrecer servicios de mayor valor añadido y optimizar su rendimiento.
- Agilidad y automatización: La inteligencia artificial, los motores de predicción y las herramientas de simulación jugarán un papel crucial para mejorar la planificación y capacidad de anticipación, minimizando el impacto de posibles crisis futuras.
- Personalización: Los consumidores demandarán cada vez más servicios logísticos adaptados a sus necesidades, con entregas flexibles y mayor transparencia. Las empresas deberán ofrecer opciones como dark stores, lockers o puntos de recogida en entornos urbanos para facilitar el proceso.
- Atracción de talento: La escasez de mano de obra y el envejecimiento de las plantillas serán retos importantes. La automatización de tareas físicas permitirá que los profesionales se centren en funciones de mayor valor añadido, como la gestión de nuevas tecnologías.
- Sostenibilidad: La sostenibilidad será un pilar central, con medidas que abarcarán desde el abastecimiento hasta la última milla. Las empresas deberán implementar tecnologías que les permitan reducir emisiones y residuos, y cumplir con las normativas ambientales cada vez más estrictas.
- Seguridad: La seguridad, tanto física como digital, será una prioridad. Tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT) y la inteligencia artificial permitirán mejorar la prevención de riesgos, tanto en la protección de datos como en la seguridad laboral.
La logística de 2034 será un modelo completamente transformado, en el que la tecnología y la sostenibilidad jugarán roles fundamentales, y en el que la especialización y la colaboración entre empresas se convertirán en las claves para sobrevivir en un entorno cada vez más competitivo.