Los diferentes operadores logísticos, como FedEx, se preparan para hacer frente a los "obstáculos" que la celebración de los JJOO harán que se encuentren en el centro de París.
Este verano, París no solo será el centro de atención mundial por los Juegos Olímpicos de 2024, sino también un desafío logístico sin precedentes. FedEx, consciente del impacto que este evento tendrá en la ciudad, ha diseñado un ambicioso plan para mantener sus operaciones sin contratiempos y continuar ofreciendo un servicio de calidad a sus clientes.
Bajo la dirección de Eser Sezek, vicepresidente de Operaciones Terrestres de FedEx en Francia, la compañía ha introducido una serie de medidas para hacer frente a la congestión y las restricciones de tráfico que se esperan. “Estamos preparados para afrontar este reto como un maratón, no como un sprint”, comenta Sezek, enfatizando el compromiso de la empresa con la excelencia operativa durante este diferente periodo.
Entre las estrategias más destacadas, FedEx ha implementado el uso de bicicletas de carga para acceder a zonas restringidas, que facilita las entregas en áreas congestionadas utilizando un método más sostenible. Esta iniciativa permite a los mensajeros de la compañía llegar a lugares que serían inaccesibles para vehículos más grandes, adaptándose así a las circunstancias que rodean a la ciudad durante los 19 días que durarán los Juegos Olímpicos de París 2024.
FedEx: Nuevas soluciones de recogida y entrega para los JJOO
Además, la empresa ha reforzado su red con la creación de microcentros urbanos, una solución que agiliza el flujo de paquetes y minimiza los retrasos en el reparto que pueda ocasionar el evento. A esto se suma la promoción de la opción “Retener en la estación”, que ofrece a los clientes la flexibilidad de recoger sus envíos cuando les convenga, una solución especialmente útil durante este periodo de alta actividad.
Con la activación de los carriles olímpicos y las zonas de seguridad, como las zonas rojas y azules, FedEx ha tenido que ajustar sus rutas y horarios de entrega. A pesar de estas restricciones, la empresa ha asegurado que seguirá trabajando estrechamente con las autoridades locales para garantizar la seguridad y la puntualidad de sus servicios.
La compañía americana también ha puesto en marcha un sistema de “torre de control” para monitorizar en tiempo real todas las operaciones, lo que permitirá realizar ajustes en las operativas rápidamente según las necesidades del momento. Esta vigilancia constante es clave para mantener el servicio sin interrupciones y asegurar que incluso los envíos más críticos, como los de productos farmacéuticos o materiales médicos, lleguen a su destino en tiempo y forma.
Con este conjunto de medidas que está desplegando el operador, además de mitigar los retos logísticos derivados de un evento deportivo como pueden ser los Juegos Olímpicos, desde la compañía expresan que también ven esta situación como una oportunidad para demostrar su capacidad de adaptación a cualquier escenario.