Asociaciones como Fenadismer, UNO o AECOC han presentado las reformas que creen imprescindibles para el progreso del sector.
El sector logístico percibe la falta de representación en los programas electorales de las candidaturas presentadas ante las elecciones generales que tendrán lugar el próximo 23 de julio. Asociaciones como Fenadismer, UNO o AECOC han hecho declaraciones durante las últimas semanas, en las que exponen el potencial del sector y la necesidad de involucración del gobierno resultante de los comicios con la logística.
Los programas de los partidos mayoritarios en el país (PP y PSOE) abogan por la inversión y el impulso al transporte ferroviario, algo que también recoge el programa de VOX, que además añade una mención al sector sin especificar las medidas propuestas. Sumar también aboga por el impulso al ferrocarril y centra sus propuestas en el ámbito del transporte en su descarbonización. El partido de Yolanda Díaz apoya las ayudas a la electrificación de flotas de profesionales autónomos y propone establecer centrales únicas de rotura de cargas y de distribución de última milla.
Las claves logísticas tras el 23J
Por su parte, las asociaciones involucradas con la logística reclaman la inclusión de un mayor número de medida que tengan un impacto real en el progreso del sector. El presidente de UNO, Francisco Aranda, ha expresado durante sus últimos actos públicos la necesidad del impulso a la colaboración público-privada y a la digitalización del sector. Además, ha expresado el deseo del sector de contar con el apoyo del Gobierno para convertir al país en un hub logístico intercontinental.
Fenadismer sigue defendiendo los intereses de los transportistas y reclama al futuro gobierno la consideración a la hora de elaborar medidas que afecten a un colectivo que ocupa el 90% de la cuota de mercado del transporte de mercancías.
Entre las propuestas de AECOC a los partidos políticos españoles, también hay un apartado centrado en la logística y el transporte. La asociación cree que entre las principales medidas se deben establecer la puesta en marcha del Corredor Mediterráneo, la armonización de las ZBE y la aprobación de las 44 toneladas de carga para los vehículos de transporte terrestre de mercancías, que quedó en stand-by debido al adelanto electoral.