Un reciente estudio de Miebach y Grupo CTC ha constatado que el uso de exoesqueletos activos o pasivos en el entorno portuario aumenta la productividad hasta en un 30%.
La consultora Miebach, junto al operador logístico Grupo CTC, ha llevado a cabo un estudio para evaluar si el uso de exoesqueletos en el transporte marítimo es viable. El objetivo del proyecto es mejorar las condiciones de los trabajadores que descargan contenedores, aumentando a la vez su eficiencia.
Los exoesqueletos han ganado popularidad como herramientas prometedoras en entornos industriales y logísticos. Aunque actualmente existe una amplia gama de opciones disponibles en el mercado, el estudio ha evaluado cuatro soluciones diferentes que destacan por su funcionalidad y aplicaciones específicas en este tipo de tareas.
Parte de los modelos analizados fueron exoesqueletos activos, los cuales incorporan partes móviles impulsadas por motores eléctricos o neumáticos. Estos dispositivos proporcionan asistencia al usuario, aumentando su capacidad física y reduciendo la fatiga durante las tareas laborales.
El estudio también analizó exoesqueletos pasivos, que operan sin la necesidad de una fuente de energía adicional. Estas soluciones utilizan un sistema mecánico basado en estructuras articuladas para transferir energía al usuario. Su enfoque se centra en distribuir la carga soportada por una parte específica del cuerpo hacia áreas con una musculatura más fuerte. De esta manera, se logra una mejor distribución de la carga y, también, se minimiza el esfuerzo físico requerido.
Para evaluar la efectividad de estos exoesqueletos, se llevaron a cabo pruebas en dos situaciones laborales específicas: la descarga de cajas de contenedores y la manipulación de sacos pesados. Además de su desempeño, también se ha considerado la rentabilidad de cada opción.
Después de un exhaustivo análisis y pruebas comparativas, se ha llegado a la conclusión de que los exoesqueletos pasivos son herramientas adecuadas para reducir considerablemente la carga de trabajo al descargar cajas de contenedores marítimos. Estos dispositivos no solo ayudan a prevenir lesiones, como el dolor de espalda, sino que también se han demostrado efectivos para llevar a cabo tareas de carga y descarga.
Por otro lado, los exoesqueletos activos, diseñados específicamente para operaciones logísticas, ofrecen la posibilidad de aumentar la productividad de estas operaciones hasta en un 30%.
En general, la incorporación de exoesqueletos representa una mejora significativa en las condiciones laborales de los trabajadores, al tiempo que reduce la rotación del personal, el absentismo y los riesgos de lesiones. Estas soluciones innovadoras están revolucionando la industria, brindando un apoyo físico adicional y mejorando la eficiencia en los entornos de trabajo más exigentes.
Dachser: caso de éxito
A pesar de que el estudio aporta conclusiones valiosas, ya son multitud las empresas que han incorporado o planean incorporar estos dispositivos en sus actividades diarias. Uno de los claros ejemplos es el de Dachser, que desde el año pasado usa exoesqueletos para mejorar las condiciones de trabajo en sus almacenes.
La compañía alemana comenzó a testear estas soluciones en 2019, cuando incorporó algunos exoesqueletos pasivos con sistemas de muelles mecánicos, raíles o pesas para facilitar el levantamiento de cargas.
“El uso de exoesqueletos activos es una demostración impresionante de cómo la tecnología moderna no solo facilita el trabajo de forma inmediata, sino que también puede tener un impacto positivo en la salud de nuestros profesionales a largo plazo” Thomas Klare, Head of Corporate Contract Logistics en Dachser.
Debido al desarrollo de la industria durante los últimos años, Dachser adquirió exoesqueletos activos del modelo “Cray X” del fabricante German Bionic. Estas soluciones se llevan utilizando desde primavera de 2022 en el centro de Magdeburgo (Alemania) para apoyar varios procesos de entrada de mercancías, preparación de pedidos y también en la mesa de embalaje.
La implantación de exoesqueletos, al alza
Si bien los accidentes laborales en entornos logísticos cada vez son menores, como exponen los datos ofrecidos por UNO, algunas actividades siguen siendo manuales y encarnan riesgos para la salud del trabajador. La mayoría de los accidentes laborales se producen por sobreesfuerzos musculares, esguinces o dislocaciones. Por ello, mutuas como Umivale han implantado en algunos supermercados estos aparatos para prevenir lesiones, como publica El Español.
Incluso algunas empresas logísticas, como el operador FM Logistic, han desarrollado sus propias soluciones para evitar el manejo de grandes cargas a sus operarios. La compañía presentó en 2019 el “Ergoeskel”, desarrollado y patentado junto con la Universidad de Tecnología de Compiègne (UTC), en Francia.
La solución pesa 2,8 kg y permite manejar cargas de hasta 25, reduciendo el peso cargado sobre la espalda y los músculos superiores en un 70%. La empresa desarrolló diez dispositivos que probó en cinco de sus almacenes en Francia, para que 25 trabajadores pudieran probarlos. Según la compañía, el dispositivo es fácilmente ajustable y el 85% de los trabajadores que lo probaron, expresaron que podían moverse libremente.