Desde enero, el 35 por ciento de los e-shoppers habituales ha realizado algún pedido de alimentos frescos y bebidas, manteniéndose como tendencia destacada desde el comienzo de la pandemia
La pandemia ha cambiado el mundo tal y como lo conocíamos, transformando a su paso muchos de los hábitos preestablecidos previos a ella, incluida la forma en la que compramos. El ecommerce, que ya se convirtió en un canal de referencia para una nueva generación de consumidores que prefiere realizar sus compras desde sus smartphones o tablets, y que deja ya atrás el concepto de internet como un lugar solo para encontrar ‘gangas’, ha conseguido universalizar más si cabe su uso entre la población general.
DPDgroup, grupo del que forma parte SEUR, ha elaborado su nueva edición del informe E-shopper Barometer, en el que analiza tendencias y comportamientos de los compradores online europeos a la hora de adquirir productos online. En su nueva edición, el estudio arroja datos muy reveladores como, por ejemplo, que el 15,5 por ciento de las compras de los consumidores europeos ya se realizan a través de internet. Entre estos e-shoppers, los llamados habituales, llegan a realizar una media de 43 compras al año en todo tipo de categorías de productos.
“El comercio electrónico ya es parte de nuestra vida y conocer los perfiles de nuestros clientes nos ayudará a seguir prestando un servicio acorde con sus necesidades, ya que, además, se tratan de consumidores muy exigentes que tienen claras cuáles son sus demandas y reclaman que sean satisfechas de la mejor manera posible”, declara David Sastre, director de Clientes de SEUR. “Además, la consolidación del ecommerce, que convive con el comercio tradicional, ha dado lugar al llamado ‘nuevo comercio’, que es la evolución de la omnicanalidad, y que combina la experiencia de la tienda física con la comodidad de las compras por internet”, añade Sastre.
Sectores con gran crecimiento
Si hay un segmento de productos que se ha beneficiado sin duda del boom del ecommerce durante la pandemia ha sido el de los alimentos y bebidas. Durante los meses más duros de la crisis sanitaria fue la categoría de producto que más disparó su demanda, y que incluso ha mantenido esos niveles una vez estabilizada la situación. De hecho, desde enero, un 35% de los e-shoppers habituales ha hecho pedidos online de alimentos frescos.
Sostenibilidad, una prioridad para los e-shoppers
Cada vez más consumidores habituales van al encuentro de marcas que aseguren que sus procesos y productos sean sostenibles. Un 47 por ciento de los e-shoppers habituales declara que, para ellos, realizar una compra online sostenible significa adquirir un producto respetuoso con el medio ambiente o un artículo de una marca más sostenible. Pero, además, un 65 por ciento de éstos también estaría dispuesto a cambiar de tienda para encontrar una opción de envío más sostenible.
Las soluciones out-of-home ganan terreno
Los usuarios europeos siguen valorando la flexibilidad de horarios, la información sobre la hora exacta a la que llegará su pedido y la variedad de lugares de entrega. Sobre esto último, el uso de lockers ha aumentado varios puntos, situándose en el top 3 junto con las entregas en casa y las entregas en tiendas de conveniencia. Además, siguen valorando positivamente tener un proceso simple y fácil para realizar un envío y tener acceso al estado del mismo en todo momento.