Tránsito y transporte internacional, precio de los fletes, entorno de la pandemia, infraestructuras, precios de la energía eléctrica y hábitos de consumo, impactan en el sector.
Los datos del tercer trimestre de 2021 muestran una ocupación media de los almacenes de productos congelados del 80,99 por 100, cifra muy similar a la del segundo trimestre (80,78 por 100). Por otra parte, la facturación estimada del total del sector fue de 56.091.590 euros, un 0,96 por 100 mayor que el trimestre anterior, según ha publicado ALDEFE, en su Observatorio de Almacenamiento en Frío.
El informe refleja además los efectos de la disrupción logística en los almacenes frigoríficos, cambios en el entorno que están afectando directamente a la logística del frío, dado que el retraso en la recuperación de la media de tránsito de mercancías en el comercio internacional, la competencia entre productos por ser embarcados y el aumento desmesurado de los fletes hacia algunos destinos, repercuten en un mayor tiempo de almacenamiento de los productos en los almacenes refrigerados en los centros de origen.
Esto genera en el sector del alquiler del frío una mayor demanda de espacio de almacén, tanto por parte de clientes habituales como por terceros, cuyas infraestructuras logísticas de frío no les permiten almacenar toda la producción. Además, coincide con un aumento de la estancia media de los productos por la crisis de la cadena de suministro. La rotación de los alimentos congelados, debido a su mayor tiempo de conservación que los frescos, está siendo menor en los últimos meses.
Escenario
En este escenario –señala el informe de ALDEFE- la confluencia de más tiempo de almacenamiento con mayor demanda de espacio, que podría ser en cierto modo una buena noticia para el sector, no siempre lo es. Ante una situación de disminución de la rotación, de crecimiento de los costes de almacenaje y del aumento de los costes y los retrasos del transporte para abastecer el mercado internacional, aparece en el panorama la posibilidad de que algunos productores pudieran optar por la reducción temporal de su volumen de producción o incluso por desestocar y destruir productos.
La toma de decisiones en este sentido podría acarrear la reducción de la demanda de frío en un contexto de alza de los costes energéticos y laborales de las empresas del alquiler de frío, poniendo en jaque su rentabilidad. El desmesurado y sostenido crecimiento del coste de la energía eléctrica durante los últimos meses está llevando a las empresas al límite de la rentabilidad del negocio, ya que la repercusión del aumento de los costes no siempre puede ser trasladada directamente a sus clientes.
Ante esta situación, enfatiza ALDEFE, las estrategias empresariales en el sector del almacenamiento en frío deben tener en cuenta las estimaciones sobre la recuperación de la cadena de suministro global y la evolución de los precios del transporte.
El informe apunta, también que según una encuesta de Oxford Economics entre expertos que cubren 45 economías nacionales, casi todos creen que las interrupciones en la cadena de suministro han alcanzado su punto máximo o alcanzarán su punto máximo durante este último trimestre del año 2021.
No obstante, el fin de la disrupción de la cadena logística no será rápido. Se prevé que la escasez de mano de obra en la logística portuaria y en el transporte por carretera se mantendrá hasta bien entrado el próximo año, retrasando la recuperación. Los expertos creen que el panorama comenzará a despejarse a principios del año 2022 con el fin de la temporada de compras navideñas y cuando en China cierren muchas fábricas durante una semana en febrero con motivo del Año Nuevo lunar, lo que ralentizará la producción, siempre según lo reflejado en el informe trimestral de ALDEFE.
A pesar de las dificultades coyunturales en la cadena de suministro global de este año 2021, el negocio de la logística del frío está en alza. Un informe de la consultora ReportLinker publicado en julio de 2021 presenta una tasa de crecimiento anual del mercado de la cadena global del frío del 7,5 por 100 entre 2021 y 2028. El informe publicado en abril de 2021 por Grand View Researchtodavía era más optimista, apuntando una expectativa de tasa anual de un 14,8 por 100 entre 2021 y 2028. Según esta última consultora, el mercado mundial del frío alcanzó un valor de 210.000 millones de USD en 2020 y se calcula de 238.000 millones de USD para 2021 y de casi el triple en 2028 con una previsión de 628.000 millones de USD.
Perspectivas
En este contexto de perspectivas optimistas para el sector, unos 50 profesionales del sector del almacenamiento en frío debatieron en una sesión de trabajo de European Warehouse Forum and Cold Chain Convention, organizada por la Global Cold Chain Alliance, sobre las tendencias y oportunidades del mercado durante los días 18 y 19 de noviembre de 2021 en Amberes. Este grupo de expertos concluyó que ante el comportamiento del consumidor en constante evolución y las interrupciones actuales que impactan significativamente en el mercado, las cadenas de suministro de frío continuarán adaptándose a un panorama del consumo que podrá ser totalmente diferente en los próximos años.
Las características futuras de la logística del frío serán fundamentalmente estas cinco:
1. Una mayor regionalización.
2. La robotización del proceso de almacenamiento.
3. La aparición de nuevas propuestas de valor.
4. Un cambio en las necesidades de los clientes.
5. El surgimiento de nuevas carteras y productos.
El crecimiento del sector del almacenamiento de frío en los próximos años es evidente, para hacer frente a la demanda creciente de naves a temperatura controlada. Esto representa una oportunidad para las empresas que ya operan en el sector del alquiler del frío. Pero también abre la puerta a la entrada de nuevos operadores e inversores con capacidad de realizar proyectos a medida más modernos, vinculados con los grandes del sector. Esto se convertiría también en una amenaza para las empresas con instalaciones más tradicionales, y, por tanto, con mayores gastos energéticos y exigencia de mano de obra para la conservación y la manipulación de productos por unidad de cuenta, ya que coincide con un contexto de alza sostenida de los precios de la energía.
El sector de la logística del frío presenta unas expectativas de tasa de crecimiento muy altas, que atraen a nuevos jugadores dispuestos a satisfacerla y a asumir las inversiones que las tendencias tecnológicas demandan, concluye el informe.
La atracción del almacenamiento del frío por sus positivas perspectivas de futuro es precisamente el elemento que puede terminar de poner en jaque la viabilidad de
los negocios de jugadores tradicionales con menores recursos, que deben afrontar nuevas inversiones para ser competitivos y seguir en el mercado en un contexto de exagerada elevación del coste del principal recurso para la creación de frío: la energía eléctrica.