La industria automovilística a nivel mundial podría enfrentar una cuantiosa pérdida de beneficios a raíz de las interrupciones de la cadena de suministro. Concretamente, como ha señalado este jueves la consultora AlixPartners, las pérdidas podrían ser de hasta el doble de la cifra pronosticada a principios de año, alcanzando los 210.000 millones de dólares.
La escasez de semiconductores es solo una parte del problema. Los altos precios y la escasez de suministros de productos básicos como el acero y las resinas plásticas están elevando los costes y obligando a los fabricantes de automóviles a recortar la producción.
Según el estudio, los fabricantes de automóviles están en camino de perder la producción de 7,7 millones de vehículos en 2021.
El nuevo pronóstico se produce en medio de advertencias de los fabricantes de automóviles y camiones comerciales de que la escasez de semiconductores y los picos de precios de las materias primas no se están suavizando en los últimos meses previos a 2021, como esperaban los ejecutivos de la industria.
Originalmente, muchos fabricantes asumieron que volverían a los volúmenes habituales en el cuarto trimestre. En cambio, las nuevas previsiones apuntan a que estas compañías se enfrentarán a inventarios ajustados hasta finales de 2022 y principios de 2023.
