En referencia a empresas de VTC como Cabify o multinacionales como Amazon, que emplean vehículos de particulares para repartir mensajería, la Comisión de Transportes del Congreso de los Diputados ha acordado instar al Gobierno a que elabore “un estudio de la situación en que se encuentra el sector del transporte de mercancías no superior a dos toneladas”, así como del “impacto sobre el empleo y la actividad de la entrada de nuevos operadores no especializados”.
En esta línea, la Comisión se ha comprometido a que este asunto tenga regulación legal en un plazo máximo de un año.
Medida contra el “intrusismo”
La petición que se presentará ante el Ejecutivo responde a las reclamaciones de varias asociaciones de transporte, que consideran esta actividad como una forma de “intrusismo”.
Bajo esta calificación, la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (FENADISMER) ha instado a que la regulación que finalmente se apruebe prohíba de forma expresa la realización del transporte de mercancías en vehículos que han sido especialmente construidos y acondicionados para el transporte de viajeros.
Al no reunir los requisitos técnicos para realizar el transporte de mercancías, aclaran, el uso de estos vehículos con la finalidad de realizar labores de distribución “supone un claro incumplimiento de la regulación en materia de transporte”.
“En los últimos años está proliferando una cada vez mayor situación de competencia desleal en el sector del transporte ligero de mercancías que llevan a cabo determinadas multinacionales que operan en la venta de productos a través de plataformas en internet, como es el caso de Amazon, las cuales han venido contratando a particulares para con sus vehículos turismo realizar el transporte de los productos que venden a sus clientes finales”, denuncia Fenadismer.
Culpa de la pandemia… ¿y de Cabify?
Para el representante del sector transporte, dicho fenómeno de intrusismo en el sector del transporte se ha visto acentuado de forma alarmante a partir de la pandemia, coincidiendo con la reducción de la movilidad y de reducción de la actividad económica motivada por las sucesivas declaraciones del estado de alarma.
Ello ha llevado a la aparición de nuevos operadores que han puesto en marcha esta actividad de transporte “pese a la importante reducción de la actividad que han venido sufriendo los transportistas de distribución urbana principalmente”, reclaman.
A parte de la crisis sanitaria, la federación señala especialmente a Cabify que, “ante la importante reducción de su actividad de transporte de viajeros motivado por los confinamientos domiciliarios, puso en marcha a mediados del pasado año un nuevo servicio de transporte de mercancías, aprovechando su flota de coches que se dedican al transporte de sus viajeros para hacer transporte público de mercancías”.