Bilboestiba ha aceptado la hoja de ruta marcada por el Ministerio de Trabajo para poner fin al conflicto que ha mantenido a empresas y trabadores enfrentados desde hace dos meses. Eso sí, tal y como apuntan, lo hacen con condiciones previas, como sacar de la negociación colectiva las cuestiones relativas a las tareas complementarias.
En huelga desde el pasado 9 de octubre, los trabajadores de la estiba hicieron llegar a inicios de semana su predisposición a frenar los paros de contar con el ‘sí’ de las empresas del enclave a la propuesta del Ejecutivo para retomar las negociaciones. Apurando los tiempos, ya que Bilboestiba debía responder antes del jueves 3 de diciembre, las compañías han decidido seguir adelante con el plan.
Las firmas agrupadas en Bilboestiba-CPE han mostrado su predisposición a participar en el proceso negociador con la condición previa de que “esté sometido al cumplimiento estricto de la legislación vigente”, es decir, excluir uno de los mayores puntos de fricción entre ambos colectivos como son las tareas complementarias. En relación a ello, las empresas interpretan que las tareas complementarias ya no forman parte del servicio portuario de estiba y, por tanto, deben quedar fuera de las conversaciones.
Así mismo, suman la condición de excluir la realización de las actividades correspondientes al transporte horizontal, que consideran ya interpretado y ratificado por el TSJPV y, en general, “toda aquella materia sobre la que las partes no estén legalmente legitimadas a los efectos”.
Finalmente, la organización considera “indispensable la desconvocatoria de huelga” y “el mantenimiento de los ritmos de trabajo en parámetros normales”.
De no alcanzar un acuerdo, la Sociedad de Estiba y Desestiba ha propuesto que ambas partes se sometan a un arbitraje, rechazado por sindicatos y Ejecutivo de forma inicial, para resolver las cuestiones fuera de consenso.