Conclusiones extraídas del webinar organizado por Logytalent y Hosteleo bajo el título “Reinventando el delivery”.
Los últimos meses han inundado las puertas de bares y restaurantes con carteles de “cerrado hasta nuevo aviso”. Poco a poco, el paso a las distintas fases en todas las Comunidades Autónomas empieza a mostrar la luz al final del túnel para muchos hosteleros que, durante este periodo, han experimentado con la que, según expertos del sector, será la clave de la actividad tras la pandemia: el delivery.
Aunque las cadenas logísticas se han beneficiado, especialmente las de ecommerce, la hostelería se ha debilitado. Según Gabino Diego, CEO de Foro de Logística, el sector de la restauración “ha sido de los más castigado por la crisis, con pérdidas de hasta 16.000 euros”. No obstante, destaca, gracias al delivery “muchos comercios han podido tener algo de ingresos”, teniendo en cuenta que se ha vivido “más de un 30 por 100 de incremento en el reparto de comida a domicilio”.
Se trata de una oportunidad de negocio de futuro que no resulta tan sencilla como aparenta, ya que trasladar la experiencia de la gastronomía al servicio a domicilio es todo un reto. “Tiene muchas posibilidades, pero no puede sustituir al restaurante. Son conceptos distintos, pero se viven complementariamente”, destacó el cocinero con una estrella Michelín, Pedro Sánchez.
Si bien la tendencia mostró que la primera ola produjo un incremento del consumo en los pedidos del supermercado, a medida que estos fueron disminuyendo, el delivery tomó el relevo. “Hay locales que han pasado de tener 20 pedidos a la semana a preparar 150”, asegura Jauma Boada, CEO de Mox. “Puede ser una tendencia que ha venido a quedarse”, aunque para diferenciarse hay que “hacer una inversión, promoviendo la digitalización centrando la inversión en personal instalación, producto y tecnología”, destacó.
De cara al futuro, algunos expertos como David Basilio, CEO de Hosteleo, consideran que el delivery seguirá aumentando, saliendo de las franjas horarias tradicionales —viernes, sábados y domingos por la noche— a otras habituales en otros servicios de hostelería gracias al teletrabajo. “No va a cambiar la forma de relacionarnos, pero va a ser su complemento perfecto. Muchas empresas vivían de los trabajadores de grandes empresas, pero con este cambio van a tener que ofrecer servicio delivery. Ha llegado en el momento justo, cuando el teletrabajo se implanta. Va a reforzar franjas que no pensábamos que fueran a vivir un repunte”, destacó.
