Algunas de ellas están implementando mejoras de cara a este nuevo año y otras han incorporado la flexibilidad en las entregas, dando la posibilidad al cliente de que elija la hora o franja horaria en la que quiere recibir su paquete, el lugar, que puede variar entre un punto de conveniencia, la tienda física o su domicilio, e incluso dándole la posibilidad de cambiar estos datos unas horas antes de la entrega del paquete.
La facturación del comercio electrónico en España no ha dejado de crecer y el último dato refleja que en un solo trimestre ha llegado a alcanzar los 9.333 millones de euros. Además, si nos fijamos en el número de transacciones, en el segundo trimestre de 2018 se han registrado más de 159 millones de transacciones, un 34,8 por 100 más.
Así lo confirman los datos arrojados por el portal CNMCData, donde también se precisa que las webs de comercio electrónico en España se han llevado el 52,4 por 100 de los ingresos en el segundo trimestre de 2018. El 47,6 por 100 restante se corresponde con compras con origen en España hechas a webs de comercio electrónico en el exterior.
Por otro lado, en el informe se precisa que los ingresos de comercio electrónico dentro de España (compras hechas en España a webs españolas) han aumentado un 10,1 por 100 interanual hasta los 3.101 millones de euros.
Ante una situación como esta en la que el comercio electrónico empieza a convertirse en una de las vías más importantes de intercambio, la logística tiene un papel fundamental, sobre todo por la cantidad de productos que se adquieren vía Internet, que precisan el envío de un paquete. Y de cara a 2019, teniendo en cuenta que 2018 fue el primer año en el que las ventas online superaron los 40.000 millones de euros, las previsiones indican que la tendencia alcista continuará en el tiempo, presentando nuevos retos que están más relacionados ya con la logística, que con el papel de los propios retailers y marketplaces.
Según el último informe de Idealo sobre Tendencias en eCommerce en España, los usuarios finales se han digitalizado convirtiéndose en smart consumer y aprendiendo a tomar las decisiones de compra online con mayor inteligencia y a través de dispositivos cada vez más portátiles, como el móvil.
Además de la implementación de nuevas tecnologías como el Big Data, la Inteligencia Artificial y la Realidad Aumentada, que facilitan el control de inventarios, promueven la omnicanalidad y mejoran la experiencia del usuario, las entregas rápidas y con la mayor trazabilidad posible son uno de los principales retos a los que se enfrenta el eCommerce para hacer frente a las exigencias de sus clientes.
Las entregas en menos de 24 horas o incluso en el mismo día, horas después de comprar el producto, son un requisito para los ciberconsumidores. Concretamente, uno de los informes sobre comercio electónico emitido recientemente por IAB Spain, señala que casi la mitad de los compradores considera que los plazos de entrega son uno de los aspectos fundamentales para que el proceso de compra sea finalmente satisfactorio.
Y ¿cómo ha reaccionado ante esto las empresas? Algunas de ellas están implementando mejoras de cara a este nuevo año y otras han incorporado la flexibilidad en las entregas, dando la posibilidad al cliente de que elija la hora o franja horaria en la que quiere recibir su paquete, el lugar, que puede variar entre un punto de conveniencia, la tienda física o su domicilio, e incluso dándole la posibilidad de cambiar estos datos unas horas antes de la entrega del paquete.
De cara a los nuevos retos de 2019 en eCommerce, cabe destacar que según el informe, la competencia es cada vez más feroz en la red y las empresas ya están identificando que a través de la logística de última milla es como podrán diferenciarse de sus competidores. En esta línea, cada vez más tiendas van a centrarse en mejorar su estrategia de precios, trabajar en la fidelización, ofrecer más flexibilidad en las entregas y desarrollar nuevas tecnologías que potencien su distribución sostenible y eficiente.