Vasco Air Cargo ha enviado en la bodega de un avión de pasajeros 250 kilos de plantas de un vivero canario a MercaBarna en apenas 24 horas, manteniendo intacta la salud de las mismas y evitando el hub de Barcelona, a través del Aeropuerto de Zaragoza, menos colapsado.
¿Es posible transportar unas plantas desde las Islas Canarias a Barcelona en el mismo día? Sí, gracias a la inteligencia logística. Un caso de éxito real lo muestra Vasco Air Cargo, capaz de enviar 250 kilos de plantas de un vivero a MercaBarna en apenas 24 horas, manteniendo intacta la salud de las mismas.
Jon Azarloza, ceo de VASCO, lo explica brevemente: “El proceso es delicado, deben contar con una temperatura controlada durante toda la cadena logística. Un transporte terrestre acerca la carga a la terminal de Las Palmas de Gran Canaria. Cuidado y mimo durante el vuelo a Zaragoza (Binter cuenta con 4 vuelos semanales a este aeropuerto sin colapso), y una última milla directamente a MercaBarna a través de furgoneta express con temperatura controlada. Todo ello en menos de 24 horas. Es posible”.
La ubicación estratégica de Zaragoza
“El aeropuerto de Zaragoza tiene una ubicación estratégica que permite posicionar la mercancía de manera rápida y ágil en cualquier punto de levante y norte y centro del país. Se trata de una opción que está ganando adeptos y es una alternativa competitiva al aeropuerto de Madrid o Barcelona”, declara Jon Azarloza.
900 millones de euros en plantas
Solo en 2021, la producción de flor y planta ornamental ascendió a 900 millones de euros, según los datos de la Federación española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas Vivas (FEPEX).
“Es un negocio delicado y no solo por la singularidad del producto. Estos envíos requieren de un seguimiento muy cercano y personalizado, una logística “compañera” del negocio de estas pymes, que necesitan trasladar estas bellas flores por todo el mundo. Además, las inspecciones fitosanitarias hacen más complicado el viaje de estas plantas, cuyo principal objetivo es llegar con toda su belleza intacta”, informa Azarloza.
“Una carga aérea de bodega aprovecha cada espacio y hueco posible de un avión. Debajo de nuestros asientos, unas flores pueden hacer una bonita compañía a nuestro equipaje, y se aprovecha el recorrido de pasajeros al máximo. Se acerca al máximo una carga a destinos como los aeropuertos secundarios de la Península, evitando de este modo los grandes hubs como el de Madrid”, finaliza Jon Azarloza.
