Mientras la escasez de microchips genera ondas de choque en la industria automotriz mundial, uno de los principales fabricantes de Japón, y principal proveedor de Nissan, asegura que quiere evitar el riesgo de convertirse en un “cuello de botella” renovando la forma en que administra sus cadenas de suministro.
El jefe del productor de transmisión automática, Jatco, le dijo a Nikkei Asia en una entrevista que la compañía está presionando para asegurarse de tener siempre suficientes chips, además de otros componentes clave al realizar pedidos más grandes y firmar contratos con los proveedores antes de lo habitual.
La medida se produce cuando algunos en la industria automotriz han comenzado a alejarse de los métodos “justo a tiempo”, que han dominado la producción durante décadas y tienen como objetivo minimizar el inventario y aumentar la eficiencia, a medida que las consecuencias de la pandemia de coronavirus trastocan las formas tradicionales de hacer negocios.
“Lo que podemos hacer ahora es comunicarnos a través de nuestra cadena de suministro compartiendo más estimaciones prospectivas y asegurando componentes”, dijo Teruaki Nakatsuka, director ejecutivo de la empresa, cuyo 75 por ciento pertenece a Nissan Motor.
Jatco suministra a empresas como Nissan y los socios de la alianza del gigante japonés del automóvil Mitsubishi Motors y la francesa Renault. Suzuki Motor también se encuentra entre sus clientes.
