El gigante del ecommerce vuelve a pisar el acelerador en España. Tras presentar su quinta tienda física y anunciar la apertura de otros dos establecimientos a final de año, Aliexpress ha desvelado los dos ejes sobre los que concentrará sus esfuerzos logísticos, al menos, en el corto y medio plazo.
La apuesta por la omnicanalidad de la plataforma de origen chino no solo tendrá su reflejo en el canal offline, sino en la optimización operativa de la firma.
Así lo ha señalado Eduardo Pisa, director de Marcas y Negocios de Aliexpress en España, apuntando que esta estrategia está alineada con el hecho de que el marketplace cuenta con la app más utilizada en el país, es el sitio que más creció en 2020 y el segundo negocio en penetración de mercado.
Una estrategia con dos ejes
Dado que, como explica Pisa, España sigue siendo un mercado clave para la compañía, como muestra el hecho de que sea el único país del mundo con tiendas físicas permanentes con la marca Aliexpress, la actividad alrededor del negocio principal se ha visto potenciada.
Así, con buenas previsiones de crecimiento bajo la manga, la firma asiática ha adelantado que, como una forma de plantar cara a otros gigantes como Amazon, pretende triplicar los puntos de recogida de pedidos online. En esta línea, los planes pasan por alcanzar hasta las 600 taquillas, impulsando este tipo de operativas que, hasta el momento, se encuentran solo en Madrid y Barcelona.
La idea, aclaran, es llevarlos a otras ciudades para final de año.
Por otro lado, Aliexpress quiere mejorar la gestión de los tres centros logísticos que tienen en España para que los pedidos almacenados en Europa tarden una media de tres días en llegar. Para los procedentes de China, la multinacional ha fijado una ruta internacional de carga aérea para reducir los tiempos de entrega promedio entre el país asiático y el viejo continente en más del 30 por ciento.
Así, permitirán que la entrega al cliente en España se realice en un plazo de 10 días hábiles para miles de referencias del catálogo.
