La unidad exprés de FedEx ha anunciado un plan para despedir entre 5.500 y 6.300 empleados en Europa – en equipos operativos y funciones administrativas -, a medida que se acerca a la finalización de la integración de TNT Express.
Tras adquirir la compañía holandesa en 2016, ahora la empresa estadounidense se encuentra en los últimos estadios del proceso para culminar la integración de las redes de TNT, que supondrá un despido sustancial de personal con el fin de evitar duplicidades y reducir sus costes.
Tal y como ha anunciado la multinacional, se estima que el ajuste de plantilla en Europa suponga un impacto adverso de hasta casi 600 millones de dólares, mientras que reportará un ahorro de costes anual de 350 millones a partir del ejercicio 2024.
Los planes para abordar la duplicación resultante se presentaron en la tarde del martes a los representantes de los empleados en el mercado europeo, aunque, previo a la finalización de dichos contratos, se llevará a cabo un periodo de consultas durante los próximos 18 meses en función de las regulaciones de los países.
El elemento clave del plan de la compañía pasa por la integración física de las redes aéreas de TNT y Fedex Express, que permitirá asentar un modelo de doble ‘hub’ en Europa, convirtiendo el aeródromo de Roissy-Charles en el enclave principal y dejado el centro aéreo de la empresa en Lieja como secundario.
¿Cómo afectará a la operativa de España?
Según ha confirmado FedEx a este medio, el proceso “tendrá impacto en España”, aunque en esta etapa no cuentan con más detalles.
“Tan pronto como se finalicen en detalle los planes para España, los presentaremos para su consulta con los órganos representativos de los empleados locales, como lo exige la ley. Estamos comprometidos a llevar a cabo este proceso con sensibilidad y en pleno cumplimiento de la legislación española e intentamos llegar al mejor acuerdo posible parar todas las partes afectadas”, aseguran.
