Sostenibilidad y eficiencia energética en el entorno del almacén, la informática como llave para el funcionamiento de la logística, carretillas elevadoras -un término que claramente es ya insuficiente para describirlas- cada vez más inteligentes y rentables, y una internacionalización que se cifra en el 38 por 100 de expositores y que algunos de ellos -nos comentan a pie de stand- elevan hasta el 50 por 100 en lo que a visitantes se refiere. Estos son algunos de los titulares -ya casi definitivos a 24 horas del cierre de CeMAT 2011- con los que puede resumirse la edición de 2011 de la feria mundial de la intralogística en la que, sin lugar a ninguna duda, la logística se ve ya por todos como un todo en el que no hay eslabón que sea independiente del resto.
En general los expositores se muestran satisfechos con los resultados a este momento (tanto los nacionales alemanes como los extranjeros) aunque con algún pequeöo “pero”. Y es que CeMAT no se “salva” de esa estadística común a casi todas la ferias en las que los dos centrales (miércoles y jueves en este caso) concentran claramente la mayoría de visitantes, de manera que los más opinan que martes y, sobre todo, lunes estuvieron por debajo de las expectativas de visitantes.
Aún así el comentario es positivo. Especialmente por las oportunidades de verdadero negocio internacional que se genera o abre desde CeMAT. Para las empresas hispanas llegadas aquí como expositores directos -así nos lo expresan AR Storage o Móstoles Industrial- no hay duda y se congratulan de haber tomado la decisión de exportan y participar en mercados y escaparates internacionales como este hace algún tiempo. Gracias a ello, con el mercado interno maltrecho, hoy sobreviven.
Público interesado y en su inmesna mayoría profesional, una climatología que se sigue uniendo a los resultados positivos del negocio, favoreciendo los tránsitos entre zonas interiores y exteriores, y un comportamiento festivo en el que no falta la música, los espectáculos, actores, demostraciones, globos aerostáticos, entrenadores de la Bündesliga dando charlas sobre motivación, una sosias de Marilyn Monroe, un conjunto de country, coches de época, juegos, máquinas de casino,…un ambiente que quizás sólo se entienda en las grandes ferias alemanas como CeMAT y que, lejos de ser frívolo, es el contrapunto a un escaparate de novedades mundial que algunos -eso sí, los menos- ven escaso de verdaderas primicias.
Sea como fuereCeMAT 2011 es, en el ámbito logístico, fiel reflejo de que la aldea global es cada vez más global y más aldea.