El fabricante de equipos Jungheinrich ha celebrado en las instalaciones de su delegación centro en Pinto (Madrid) un evento profesional en el que reunido a 80 clientes con el foco –y debate- en el cambio tecnológico y de organización al que se enfrentan actualmente las empresas que buscan la competitividad y la reducción de costes, y en concreto lo que supone el paso de la tecnología eléctrica tradicional, en las baterías de las carretillas elevadoras, a la tecnología de iones de litio (Li-Ion).
La jornada arrancó con una ponencia “InnovAction”, de Lluís Soldevila, consultor formador en habilidades directivas y actitudes de alto rendimiento, que explicó en su ponencia las claves de la fórmula para perder el miedo al cambio.
En lo que se refiere al aspecto tecnológico Jungheinrich apeló al cambio de la batería de ácido-plomo convencional a la batería de iones de litio. “Más allá de lo meramente tecnológico, es un cambio organizativo, de mentalidad, de modelo de negocio, y no es una opción que podamos escoger sino que es un cambio que ya está aquí y es necesario”, aseguró Daniel España, director de Account Management de Jungheinrich España. La tecnología Li-Ion ha revolucionado el mercado de las carretillas eléctricas reduciendo significativamente el TCO (Coste Total de Propiedad) de la flota gracias a períodos operativos más largos y costes de explotación mucho más bajos, señalan desde esta compañía de matriz alemana, cuyo porcentaje de ventas en el mercado nacional, de carretillas equipadas con esta tecnología, es ya de un 25 por 100.
Las razones, entre otras, hay que buscarlas en la rentabilidad, siempre que haya una mínima masa crítica mayor de un turno. Así, en uno de los talleres organizados en el evento, los responsables de Jungheinrich mostraban un caso real de una compañía que ha cambiado su flota eléctrica a otra equipada con baterías de iones de litio y como, con este cambio, la ligera reducción del número de máquinas necesarias, la obtención de espacio de almacenamiento al suprimir la sala de baterías, un menor tiempo de recarga y menor mantenimiento, van a lograr un ahorro económico considerable, a pesar de que el coste de alquiler de estos equipos es algo mayor.
Las furgonetas del servicio postventa
Paralelamente Jungheinrich ponía el énfasis en el servicio postventa de las carretillas equipadas con baterías de iones de litio que, como nos comentaba en exclusiva Dirk Mirovsky, director general de la marca en España, requieren de conocimiento, personal especializado y medios, como las nuevas furgonetas del servicio postventa, presentadas en el evento. Estos vehículos han sido diseñados en Alemania y son el primer y único servicio en el mercado dedicado exclusivamente a la reparación de carretillas de Li-ion.
Carretilla retráctil ETV 216i y apiladora ERC216zi
Las estrellas de la jornada fueron, igualmente, la carretilla retráctil ETV 216i y la apiladora ERC 216zi, ambas equipadas con batería de iones de litio. La ETV 216i, que ha recibido el premio iF Design Award 2019, es la primera carretilla retráctil en el mundo que ofrece un diseño con batería totalmente integrada, es mucho más compacta que las carretillas retráctiles convencionales, proporciona mayor agilidad y una ergonomía mejorada, lo que le brinda al carretillero más libertad de movimiento y una mejor visibilidad general, señalan fuentes de Jungheinrich.
Por su parte la ERC 216zi es la primera carretilla apiladora retráctil con batería de iones de litio integrada, lo que la hace particularmente compacta y ágil. En lugar de la bandeja de la batería detrás del mástil que anteriormente era estándar en este tipo de carretillas, el habitáculo de almacenaje de energía de la ERC 216zi se ubica en el centro de la carretilla. Con una longitud de 1.245 mm, la ERC 216zi es 170 mm más corta que otras carretillas equiparables.
