El CEO de ONE, Jeremy Nixon, apunta a que no hay un problema de sobrecapacidad en el transporte marítimo, sino que ahora mismo se enfrentan a una escasez de embarcaciones disponibles.
Las compañías de transporte marítimo de contenedores están enfrentando dificultades para lidiar con la congestión en los puertos y la escasez de buques portacontenedores, según declaraciones de Jeremy Nixon, CEO de Ocean Network Express, al diario económico Financial Times.
El cambio en las rutas de transporte marítimo por los ataques hutíes en aguas del mar Rojo han ocasionado retrasos y llegadas de buques que no estaban programadas a diferentes puertos. La situación se hace especialmente patente en los principales puertos asiáticos, pero también en los del Mediterráneo, según el CEO de ONE.
El directivo negó al medio estadounidense que la industria estuviera experimentando un problema de sobrecapacidad y explicó que ONE, que opera la sexta flota de buques portacontenedores más grande del mundo, está teniendo una escasez de embarcaciones para completar con normalidad todos los servicios semanales que ofrece.
La crisis en el mar Rojo hace patente la escasez de buques
Debido a la situación en el mar Rojo, las compañías de transporte marítimo se tienen que enfrentar a rutas de hasta 102 días para completar un viaje entre Asia y Europa con retorno al puerto de salida. Esto supone que las navieras deben desplegar hasta 16 buques portacontenedores para poder ofrecer todos sus servicios semanales, cuando anteriormente bastaba con fletar 12 embarcaciones.
En sus declaraciones, Nixon indicó que los buques de ONE se encuentran operando entre un 10 y un 15% más rápido de lo habitual para minimizar los retrasos, aunque esta medida no es capaz de compensar la falta de portacontenedores que sufre el transporte marítimo de mercancías. Y añade: “Sencillamente, no hay suficientes buques disponibles en todo el mundo (…) para cubrir estos tiempos de tránsito mucho más prolongados”.