Reducir las emisiones de dióxido de carbono al menos un 55% para 2030 y lograr la neutralidad climática en 2050. A grandes rasgos, estos son los objetivos del Pacto Verde Europeo que pide a los países de la Unión Europea y a sus compañías que afronten con firmeza y compromiso esta misión. Y va a exigir nuevas alternativas energéticas en intralogística.
Hoy en día la neutralidad climática es una meta urgente y necesaria, no solo reclamada por los ciudadanos, sino también por las instituciones públicas, que supervisan que los cambios se concreten en el plazo y tiempos establecidos.
La implicación dentro del sector logístico es fundamental en este reto, ya que influye en establecer una cadena de suministro de bienes y servicios sostenible y en línea con estos criterios medioambientales. En este contexto, el proveedor de soluciones de intralogística STILL refuerza el compromiso que comenzó hace casi 20 años para crear soluciones alternativas libres de emisiones de CO2.
Los objetivos de STILL en su lucha por un futuro —y presente— más sostenible están claros. Por un lado, afianzar el uso de maquinaria con baterías de iones de litio mediante su tecnología STILL Li-Ion. Por otro lado, promover a medio y largo plazo el empleo del hidrógeno verde como forma de energía limpia y convertirlo en un sistema eficiente y rentable presentando su propia pila de combustible de 24V. Todo ello para avanzar hacia un mañana sin emisiones nocivas, aportando nuevas alternativas energéticas.
Las baterías de litio: solución sostenible ya disponible
STILL lleva años presentando su tecnología Li-Ion de como la mejor de las alternativas energéticas frente a las máquinas con baterías de ácido-plomo. Un sistema diseñado para conseguir 3 horas de autonomía con solo 1 hora de carga, que da una alta disponibilidad a los vehículos de manutención eléctricos y que, a diferencia de las carretillas convencionales, pueden realizar cargas intermedias sin que la batería de litio se dañe.
Los modelos de STILL pueden descargarse un 95% sin pérdidas térmicas o de potencia y tienen una vida útil de unos 4.000 ciclos de carga frente a los 1.200 de las baterías de ácido-plomo. Para promover el impulso de esta tecnología libre de emisiones de CO2, STILL avala la durabilidad de esta tecnología con un sello propio de rendimiento energético, STILL Energy Performance.

En este punto hay que destacar que existen otros factores más allá de la sostenibilidad que intervienen en la elección de un sistema de energía en intralogística. Los expertos de STILL priorizan el asesoramiento en sus proyectos para lograr que sus clientes usen de forma competente sus tecnologías y que estas sean coherentes con sus circunstancias particulares. Por ejemplo, para almacenes con pocos turnos de trabajo el ácido-plomo continúa siendo más rentable, mientras que las baterías de iones de litio STILL son la solución más completa y beneficiosa para flotas de uso intensivo.
Escoger entre las mejores alternativas energéticas
El principal motivo de ello es que, aunque la adquisición de carretillas con la tecnología Li-Ion implica un gasto dos o tres veces superior a la compra de otras con baterías de ácido-plomo, las de litio producen ahorros operativos que compensan ampliamente la inversión. En concreto, las carretillas térmicas necesitan una infraestructura específica de carga e intercambio de baterías con sistemas de seguridad como extractores de aire y depósitos de agua. Sin embargo, los vehículos con baterías de litio son seguros, tan solo requieren de un cargador y no necesitan mantenimiento ni espacio para intercambiar las baterías con una grúa u otra carretilla, por lo que el ahorro en gastos operativos aumenta.
Cabe destacar que el coste de las baterías de litio en el mercado intralogístico se ha reducido considerablemente entre 2010 y 2020, por lo que podemos esperar que, en pocos años, esta tecnología sea más asequible y rentable. En ese sentido, STILL ofrece la línea de carretillas contrapesadas con la tecnología Li-Ion Ready, la cual permite intercambiar las baterías de ácido-plomo por las de iones de litio de forma fácil y sin complicaciones.
Sin duda, la energía es un bien muy preciado y su uso ha de ser inteligente. Por, eso en este contexto en el que la energía eléctrica está al alza en precio y consumo, STILL continúa desarrollando mejoras para optimizar su tecnología Li-Ion y evitar costosos picos de potencia. Por ejemplo, mediante sus nuevos cargadores inteligentes. Con ellos, STILL manifiesta un compromiso firme con todos sus clientes al mantener su asequible oferta de vehículos con baterías de ácido-plomo mientras fortalece la tecnología Li-Ion y trabaja en alternativas energéticas todavía más novedosas.
La pila de hidrógeno: energía de futuro
STILL lleva casi dos décadas involucrado en proyectos con un sistema de energía revolucionario: la pila de combustible alimentada por hidrógeno. Con esta experiencia a sus espaldas, su gran apuesta para 2023 es lanzar una pila de hidrógeno de 24V de producción propia. De esta manera, STILL quiere ofrecer un servicio totalmente integral a los clientes que se decanten por esta tecnología, como ya hacen con STILL Li-Ion, encargándose de la planificación del proyecto, asesoramiento, instalación de la infraestructura y provisión de vehículos y servicio técnico.

La gran ventaja de este sistema es que las máquinas impulsadas por pila de combustible consiguen una disponibilidad media de 8 horas con apenas 3 minutos de carga de hidrógeno mediante dispensadores similares a los de las gasolineras. Todo un sueño para quienes gestionan almacenes en constante movimiento. Los beneficios de este sistema ya se han podido observar, por ejemplo, en instalaciones como las de Carrefour en Vendin-le-Vieil (Francia), un centro de distribución que en 2018 adaptó sus instalaciones para integrar una flota de hidrógeno con 137 vehículos. Sin infraestructuras de carga o ventilación ni baterías de reemplazo y con un único mantenimiento anual, la multinacional francesa ahorró 300.000 kWh de electricidad en un año e impidió la emisión de 20 toneladas de CO2.
Coste de acceso a la tecnología y autoconsumo
Desde STILL insisten en adecuar el sistema de energía a las características de cada compañía y recomiendan valorar la pila de combustible, actualmente, solo si se dispone de capital de inversión y una flota con múltiples turnos de uso. Y es que el coste de acceso a esta tecnología es hoy el mayor reto para la democratización de la pila de combustible. No obstante, al igual que los costes de las baterías de litio han ido reduciéndose a medida que esta tecnología penetraba en el mercado, la clave para mejorar el acceso a la alternativa del hidrógeno verde es adoptarla con inteligencia y ayudados de las diferentes subvenciones públicas que impulsan los negocios a favor de la descarbonización.
En ese sentido, STILL visualiza un futuro a largo plazo en el que las compañías autogenerarán su propio hidrógeno mediante electrolizadores impulsados por aerogeneradores o placas solares propias. Aunque parezca un escenario lejano en el tiempo, esta ya es la realidad del centro de producción de Corstyrène en Aléria (Francia), un especialista en aislamiento térmico que en 2021 adquirió 7 carretillas elevadoras de pila de combustible e instaló paneles solares en el parking de la fábrica con los que recargar su nueva flota. Solo mediante el empleo de estas fuentes de energía limpias el uso de la pila de combustible tiene sentido.
En un futuro próximo, a través del esfuerzo público y privado se logrará un entorno equilibrado y una producción libre de gases de efecto invernadero. Con el desarrollo de estas nuevas tecnologías, STILL muestra que su compromiso es firme y que seguirá explorando por desarrollar opciones tecnológicas limpias y rentables al alcance de todos los usuarios.