El hub de Palletways en Zaragoza, cumple su 12º aniversario. Se trata de la primera instalación que la compañía especializada en la distribución exprés de mercancía paletizada, perteneciente a Imperial, del Grupo DP World, pusiera en marcha fuera de Madrid.
Con esta infraestructura, para dar servicio nacional y europeo, Palletways arrancaba su estrategia “para atender de forma más eficiente los mercados regionales”, afirman fuentes de la compañía de paletería.
Crecimiento y ámbito internacional
Durante este periodo, el hub ha mantenido un continuo ritmo de crecimiento. La ubicación ha contribuido a ello. En su momento y tras un estudio, se concluyó que Zaragoza era la mejor localización para iniciar esta nueva aventura, al concentrar un importante porcentaje del PIB nacional y como un punto clave para las exportaciones.
Desde los apenas 200 palés que se distribuyeron en su primer día de operaciones, actualmente se superan las 1.000 unidades.
Palletways en Zaragoza, hub y depot
Unos de los primeros hitos que propulsó el crecimiento de esta infraestructura fue el hecho de tener un depot propio en el mismo hub, lo que supuso un impulso al crecimiento y dio soporte a los miembros de la zona para su desarrollo. Asimismo, la apuesta inicial de la compañía fue por convertirlo en un hub internacional.
Concretamente, este hub da servicio a Europa y, junto a los 27 depots que lo conforman, también cubre la zona de País Vasco, Cataluña, Navarra, La Rioja, Valencia, Castellón y Baleares, lográndose acortar tiempos de entrega, costes y reducir el impacto medioambiental.
Un hub “verde”
En esta instalación se han realizado todas las adaptaciones necesarias para que el consumo energético sea de impacto cero de emisiones, ya que está suministrado por energía 100 % verde. De hecho, su certificación ISO 14064 realizada en 2012 y con la que forma parte del proyecto iniciado en el conjunto de la red Lean & Green promovido con AECOC avala este respeto medioambiental.
En cuanto a la operativa, se halla en un momento de transformación debido a la incorporación de vehículos de propulsión amigable, como gas natural comprimido (GNC) y eléctrico en la flota. Así como en la implantación de megacamiones y duotrailers que con su gran capacidad reducen el impacto en la Huella de Carbono.