Finalmente y tal y como estaba previsto desde el pasado viernes 31 de agosto, el Consejo de Ministros ha prohibido, desde ayer, la circulación de vehículos de transporte de mercancías de cuatro o más ejes, por varios tramos de la N-340 y la N-420 a su paso por Cataluña. Una restricción que se ha convertido en la imposición a los transportistas de circular por las autopistas AP-7 y AP-2, “a cambio de una rebaja en el precio del peaje”.
En el caso de la N-340, se prohibe la circulación de este tipo de vehículos por el tramo entre Peñíscola (Castellón) y L’Hospitalet de L’ Infant (Tarragona), y entre Altafulla (Tarragona) y Vilafranca (Barcelona). En la N-240, la prohibición afectará al tramo entre Les Borges Baln-ques (Lleida) y Montblanc (Tarragona).
Tras esta decisión, la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM) ha querido mostrar su “más absoluta repulsa y total rechazo” a la puesta en marcha de estos desvíos obligatorios que, según el sector, “además de atentar contra el derecho fundamental de la libre circulación, generan graves y costosos problemas para las empresas de transporte a las que representamos”.
Por ello, han querido mencionar que, “entre otros muchos” hay dos graves problemas a destacar frente a esta situación:
– Aumento innecesario de los kilómetros recorridos, e importantes pérdidas de tiempo derivadas de las complicaciones que conlleva acceder o abandonar las vías de peaje.
– Imposibilidad de acceder a las áreas de servicio situadas en la N-340 y la N-420 tanto para repostar y realizar el mantenimiento de los vehículos como para descansar, privando a los conductores de “servicios básicos debido al insuficiente número de áreas de descanso” existentes en las autopistas AP-7 y AP-2.
Uno de los motivos que mueven a la administración a tomar esta determinación es garantizar la seguridad vial. Sin embargo, la CETM ha querido destacar que el transporte de mercancías por carretera es un sector “absolutamente comprometido con su seguridad y con la de todos los usuarios de la carretera, realizando para ello un importante esfuerzo inversor tanto en la compra de vehículos de última generación con las más sofisticadas medidas de seguridad, como en la contratación y formación de conductores altamente cualificados, además de defender y promover el riguroso cumpliendo de la normativa de tiempos conducción y descanso”.
Para argumentar esta afirmación, la CETM ha ofrecido el dato que respalda esta reclamación: y es que según ellos, las “cifras de siniestralidad han bajado en casi un 20 por 100 en el último año, mientras que aumentaban las de prácticamente la totalidad del resto de usuarios de la vía, lo que choca de pleno con la campaña de desprestigio y culpabilización que hoy sufre nuestro sector al querer retirarle obligatoriamente de unas carreteras que utiliza con tanta seguridad como el que más”.
Asimismo, para finalizar la reclamación, la CETM no ha querido dejar de recordar que en España están aumentando los peajes, como ocurrió recientemente en La Rioja y Guipúzcoa, algo que han definido como “la Euroviñeta encubierta”. Por estos motivos, la Confederación ha pedido al Ministerio la “inmediata suspensión de estas restricciones”.
