La globalización y el nuevo tipo de demanda y gestión logística que viene dada por el crecimiento del comercio electrónico, están provocando un importante aumento del volumen de pedidos enviados y que, por ende, las distancias que se cubren para dar cobertura a su distribución sean cada vez mayores.
En este sentido, el número de envíos frecuentes de un solo artículo crece, y contribuye a un aumento tanto de las emisiones de carbono como de los residuos que genera su empaquetado. Así, clientes y partners de todo el mundo del operador logístico DHL, aseguran que el embalaje desempeñará un papel clave en los próximos años, concretamente, de tres a cinco años. Estos datos, recogidos en el informe denominado “Rethinking Packaging”, que ha presentado la compañía, ofrecen una mirada al futuro del embalaje en el sector logístico.
El análisis de los datos desvela una clara tendencias que apunta a la necesidad de replantear en todos los sectores el actual modelo de embalaje y de aplicar la innovación al área de empaquetado de producto para dar lugar a operaciones logísticas más ecológicas y eficientes.
Además, los clientes de DHL encuestados aseguran enfrentarse a complicados retos como, entre otros, el mantenimiento de un gasto razonable en embalaje, la gestión de envíos dañados en tránsito o la optimización de la capacidad de transporte disponible. La demanda de un envío más sostenible está impulsando nuevos esfuerzos para minimizar residuos, promover materiales ecológicos e implementar nuevos sistemas de reciclaje. Los principales retailers están respondiendo a esta demanda proporcionando materiales reciclables y tratando de capitalizar la emergente oportunidad de conquistar al cliente con embalajes sostenibles y estéticamente agradables.
En todas las industrias, las exigencias en embalaje son cada vez mayores. Por ejemplo, en los sectores de la automoción y la tecnología, las cadenas de suministro deben evolucionar para dar cabida a volúmenes crecientes de componentes delicados y de alto valor. Del mismo modo, en el sector de la salud, los profesionales de la logística deben garantizar la entrega segura y apropiada de medicamentos y dispositivos que salvan vidas en los hospitales, las comunidades y los hogares de los pacientes. Dado que el comercio electrónico reemplaza al comercio minorista tradicional, el paquete en la puerta es ahora un punto de contacto crítico entre los consumidores y las marcas.
Por ello, la industria logística jugará un papel fundamental en reducir el coste, los inconvenientes y el impacto medioambiental del embalaje. Debe adoptar nuevas tecnologías, materiales y procesos en toda la cadena de valor.
En cuanto a optimización del paquete, no llenar el paquete o el vehículo contenedor de la carga es una de las principales causas de que el producto sufra daños, esto va en detrimento de los costes y de las medidas de sostenibilidad. Por lo tanto, las empresas están introduciendo un software que calcula con precisión el mejor ratio de artículos, cajas y palés y comunica los resultados directamente al receptor.
Así mismo, la automatización del paquete, donde los procesos de descarga estén automatizados, tener en cuenta los sistemas de embalaje y etiquetado en línea, los robots colaborativos para aliviar la carga del embalaje estacional y analizar las necesidades de contratación que permitirán a las empresas equilibrar el creciente mercado del comercio electrónico con una mano de obra envejecida.
En la encuesta a clientes de DHL, la mayoría de los consultados señalaron que la incorporación de materiales de embalaje sostenibles es su prioridad número uno en el corto plazo. La adopción de materiales reutilizables y programas de reciclaje de ciclo cerrado para eliminar los residuos ha aumentado recientemente, pero aún quedan algunos desafíos. Las industrias que están considerando construir un sistema de embalaje reutilizable económicamente viable necesitan pensar en el tamaño requerido de la reserva de materiales de embalaje, el diseño de sistemas para la limpieza, inspección y mantenimiento de los contenedores, y el coste, la velocidad y la facilidad de uso de los procesos de logística inversa.
En este sentido, las tecnologías de embalaje inteligente, como las etiquetas o tags inteligentes, y las medidas de protección de productos de última milla, refuerzan la conexión entre el cliente, la cadena de suministro y el paquete a través de actualizaciones en tiempo real sobre su estado y ubicación.
