Taisa Logistics da un paso más en su compromiso con la sostenibilidad a través de la optimización del consumo energético de sus instalaciones. Con este objetivo, ha sustituido las luminarias de vapor de sodio y fluorescentes de sus almacenes y oficinas por otras de tipo LED, una iniciativa con la que la compañía prevé lograr un ahorro energético anual del 40 por 100.
De forma adicional, está equipando sus plataformas logísticas con detectores de presencia, lo que contribuye a minimizar el consumo en aquellas zonas en las que no se esté produciendo ninguna actividad. Asimismo, está fomentando la implantación de placas fotovoltaicas, lo que conlleva que parte de la energía consumida en las instalaciones proceda directamente del sol.
El compromiso de Taisa Logistics con la eficiencia energética seguirá evolucionando y de forma gradual continuará incorporando en sus carretillas y transpaletas la tecnología de iones de litio, que presenta una vida útil dos veces superior respecto a la de plomo-ácido y “permite reducir las emisiones de CO2 hasta en un 50 por 100”. A estas ventajas se añade el hecho de ofrecer un tiempo de carga más rápido, mayor capacidad de autonomía y un menor mantenimiento.
“Hoy en día tenemos que ser más autoexigentes que nunca y contribuir con toda nuestra actividad al futuro de nuestro planeta. A través de pequeños gestos, como el cambio de luminarias o la incorporación de baterías de iones de litio a nuestras carretillas y transpaletas, logramos reducir nuestro impacto medioambiental de forma considerable, en línea con nuestro afán de actuar en todo momento guiados por la sostenibilidad”, explica Julio de Pazos, director de Taisa Logistics.
Ademas, junto con la aplicación de la eficiencia de manera transversal en todos sus procesos, destaca la importancia que Taisa Logistics brinda a la innovación como una herramienta para lograr un mejor rendimiento para con el entorno. Para ello, la marca asegura estar realizando también “un exhaustivo control y seguimiento de las rutas, lo que redunda en una mejora constante de sus indicadores”. En este sentido, desde 2010, ha disminuido sus emisiones de CO2 en un 7 por 100 y ha evitado más de un millón de kilómetros en desplazamientos gracias a un plan de rutas eficientes que ha implantado en todos sus trayectos, asegurando así la máxima eficiencia en cada viaje.
